No hay nada más difícil que vivir sin tí.

Saben, el día que tomo la decisión de irse me dejo un gran vació que no puedo llenar apesar del transcurso del tiempo, y no es sólo el vació si no una sensación de culpa por no a verlo escuchando cuando me lo pedía.

Siempre lo recuerdo con esa sonrisa que contagiaba siempre ocultando sus problemas, penas que lo consumían poco a poco, nos dimos cuenta demasiado tarde que él necesitaba de nosotros y que su alegría únicamente era superficial, cuando lo encontré frió y sin signos de vida me invadió una sensación de culpa y de dolor que nunca supe explicar era algo que no se podía creer, una maldita pesadilla de la cual quería despertar pero la crueldad de la realidad me hacia comprender que no era ninguna pesadilla.

Lo único que venía a mi mente eran los recuerdos alegres y tristes que vivimos, y el reproche por no saber comprender a esa persona tan maravillosa, lo único que hice fue llorar, llorar y llorar sin consuelo preguntándome siempre por que tomo esa decisión si tenía un futuro por delante y !gritaba que tonto...qué tonto! era sólo un niño.
Ahora en mis momentos de soledad me pregunto ¿Qué le empujo a cometer eso? pudo la depresión más que los sueños que tenía de ser un cadete de la Escuela Militar de Chorrillos.

Mensaje: Demostremos cuan importante es una persona para nosotros mientras lo tengomos a nuestro lado y no esperemos perderlos para darnos cuenta cuanto lo amamos.