Senti.

Cogió mis manos con tal confianza y las unió a las suyas, mis manos junto a las de él se miraban pequeñas, y algo delgadas, sentí un calor humano que nunca había sentido, aquellas grandes y cálidas manos me daban tanta confianza, y el de la mano me decía

: Nunca te dejaré ir siempre caminaremos tomados de la mano y cuando por alguna razón del destino tú estés por soltar mi mano te cogeré con más fuerza para así nunca dejarte a medio camino, pues sí no sabes nos espera un largo camino que recorrer pueda que nos toque recorrer lugares pedregosos o caminos libres de obstáculos pero siempre coge mi mano que esta presto a sujetarte con cierto cariñó por que ese es nuestro destino recorrer lugares por un largo tiempo no lo sé cuanto pero por el tiempo que duré no pienso dejar que sueltes mi mano.

No quería soltar esas manos cálidas, quería siempre estar sujeta por esas manos pero de un momento a otro me sentí sola buscaba al de la mano y no lo hallé se había desvanecido, y dije no que teníamos un largo camino que recorrer por que me dejo cuando ni aun empezamos ha andar entonces quise llorar al sentirme abandonada, fue cuando escuche un ruido que me devolvió a la realidad y me di cuenta que estaba dormida y que solo era un sueño.