Por favor otravez no.

No quiero regresar a ese lugar pero mis padres dijerón que deberiamos repetir el paseo de ayer porque según ellos fue inolvidable y creo que no se equivocaron al calivicarlo a sí, porque quede marcada por las picaduras de los malditos mosquitos que arrasaron con mis brazos y otras zonas descubiertas de mi cuerpo, no los podre olvidar porque sé como reacciona mi piel ante cualquier rasmillón, picadura o golpe en conclusión quedarán un montón de manchitas las cuales seran difíciles de que desaparescan y sobre todo porque durante la noche escocía y no pude evitar rascar alguna le las partes afectadas y esta mañana estan inchadas y de color rosado.

Saben este domingo ni loca vuelvo a ir a ese lugar por mas que mis padres se molesten, tienen que entender que no soporto a los insectos y en especial a los espantosos sapos que dan un asco y tambien estan esos gusanos peludos que los encontramos en las hojas de los árboles, por lo demas no tengo quejas todo estuvo lindo el canto de las aves, el ruido que hace del río al seguir su cauce, los arboles que nos ofrece una sombra, el pasto verde y fresco, el viento de la tarde que daba una paz y a la vez refrescaba la tarde calurosa.

Les cuento que cuando salimos de casa estaba un poco nublado y pensé que todo el día permanecería así pero me equivoque porque al llegar al lugar empeso a hacer un calor obligandonos a sacar los sambreros y plantar la sombrilla, fue todo divertido si no hubiera sido por los insectos, por favor no quiero regresar a es lugar porque ahora viendome es como sí tuviera varicela y no saben cuanto molestan esas ronchitas.